miércoles, 30 de diciembre de 2009

Cierra los ojos y muere

Hay días que son como una noche a oscuras, hoy es uno de esos. Afuera el viento y el horizonte amenazan con sus nubes de borrasca. Adentro en el corazón que a momentos quiere morir, la apuesta por dormir un poco prevalece.
Que pasó desde aquel día que el sol se balanceaba en el columpio de la vida? Ahora es tarde y las sombras de la luna colonizan mis pupilas. El silencio se vuelve melancolía. Las ventanas dan siempre hacia los laberintos internos, las paredes son del color de los huesos y el aire tiene el peso de los siglos.
La vida se arrastra hacia la muerte, así ha sido siempre y así será. Las puertas se cierran. las puertas se abren. La luz se esconde. La noche cae.
El tiempo pesa y el dolor es lento, tortura hasta los huesos, incita ha acelerar el paso al hades, y escucho esa vos que suavemente dice: cierra los ojos y muere, entonces me disparo y el dolor continúa, terebrante y exquisito, entonces lo entiendo.